¿SE PUEDE HACER DEPORTE DE MANERA SOSTENIBLE?

Estar en forma se está convirtiendo poco a poco en unos de los objetivos principales de los jóvenes y no tan jóvenes españoles. Cuando entramos en estas grandes instalaciones vemos cientos de máquinas de todo tipo. ¿Hemos pensado alguna vez en el consumo de luz que generan todas estas máquinas conectadas entre sí? ¿Y las duchas, los vestuarios, la climatización o incluso las máquinas expendedoras?

Tras la Cumbre del Clima en Madrid (2019) muchas empresas han tomado conciencia sobre la huella de carbono y están decididos a incorporarlo a la filosofía de la empresa. Este reto para los gimnasios es menos duro gracias a las subvenciones europeas para proyectos de eficiencia energética (financian hasta un 35%/45%)

Pero no solo es bueno para el planeta, sino que tiene muchas más ventajas: te hace diferenciarte de tus competidores, ahorras en la factura de la luz y del agua, da buena imagen de empresa, aporta valor añadido al entrenamiento…

Se han publicado varios estudios que demuestran todas estas ventajas y como aplicar las nuevas tecnologías a este fin. Uno de ellos es ‘Energy Generating Gymnasiums Machines for Renewable, Sustainable and Green Energy’. Este estudio explica que se podría llegar a lograr que todas las máquinas del gimnasio suministraran la energía suficiente para hacer funcionar todos los aparatos electrónicos de las instalaciones e incluso crear reservas o vender la energía sobrante.

¿CÓMO LOGRAMOS UN GIMNASIO SOSTENIBLE?

• Máquinas generadoras de energía: Como por ejemplo las bicicletas de spinning y elípticas conectadas a un generador central, transforman la energía cinética generada en el pedaleo en energía. Toda esta energía generada se inyecta a la red general local y alimenta de forma autónoma todas las instalaciones sin depender de la red eléctrica general.

Un usuario de media puede generar entre 50 y 150 watts en una sesión de 30 minutos. Teniendo en cuenta la gran afluencia de usuarios y el amplio horario de apertura de estas instalaciones (llegando a ser hasta de 24h), es una cantidad muy satisfactoria.

• Iluminación inteligente: Se trata de utilizar tecnología limpia y eficiente que se adapte a las necesidades de la empresa. No solo detectan la presencia de individuos, sino que también capaces de modular las luces al horario solar. Con esta tecnología el gimnasio ahorra la cantidad de energía que necesita, la cual puede venir de las máquinas deportivas señaladas anteriormente.

• Paneles solares: Siempre es necesario contar con energías renovables. Los gimnasios podrían ahorrar hasta un 50% del consumo en electricidad, llegando a un 100% de autoconsumo. Instalando placas fotovoltaicas por toda su cubierta.Es una inversión inteligente a largo plazo.

• Duchas que optimicen el consumo del agua (datos ofrecidos por el Instituto de Agricultura y de Recursos Naturales de la Universidad de Nebraska, se estima que en una ducha se gastan alrededor de 26 litros de agua por minuto. En este mismo informe se plantea que una ducha promedio dura unos 8 minutos, lo que nos lleva a un consumo total de 208 litros por persona.) La grifería moderna busca reducir la cantidad de agua invertida en cada uso, reduciendo alrededor de un 20% el gasto señalado anteriormente.

• Software de eficiencia energética:  Lo que no se mide no se puede mejorar. Para ello se han creado estos softwares avanzados que proporcionan el control de los parámetros de aire, agua, gas y luz. Capaces de calcular el ahorro de energía y desarrollar cálculos del rendimiento. Con todos estos datos, el gimnasio puede ir estudiando como ir avanzando hacia el consumo eficiente con las tecnologías y energías renovables de las que dispone. Utilizándolo tanto en la climatización del edificio (factor clave de consumo) o para el control de las tuberías. Puede tener el control absoluto sobre el consumo real de su gimnasio.

La preocupación por el medio ambiente va en aumento día tras días. Las nuevas generaciones se están encargando de ello gracias a su gran compromiso hacia el medio ambiente. Esto lleva a que más empresas den el paso hacia un consumo sostenible y eficiente. Teniendo en cuenta las ventajas que conlleva para el negocio con la reducción de gastos innecesarios y las ventajas que conlleva la reducción de desechos nocivos para el planeta.